A líquidos

Se caracteriza por tos o carraspeo con sensación de atragantamiento posterior a la ingesta de agua u otros líquidos. En el cáncer de pulmón no es habitual, pero puede tener lugar de forma puntual. En ocasiones, se producen además cambios en la voz tras la deglución. Se recomienda modificar y adaptar la viscosidad/textura de los líquidos, incluido el agua para evitar que estos líquidos vayan al pulmón y provoquen infecciones pulmonares que puedan ser peligrosas.

¿QUÉ TE RECOMENDAMOS?

Actualmente se pueden indicar tres tipos de viscosidades diferentes según el grado de disfagia a líquidos: néctar, miel o pudin. El oncólogo de referencia indicará cuál es la viscosidad concreta a la que se deberá adaptar cada caso.

Clasificación de viscosidad para disfagia a líquidos
Viscosidad Ejemplos de bebidas y alimentos
Néctar
Textura similar al zumo de melocotón.
Se puede beber con cañita o con vaso.
Cuando se decanta, forma un filamento fino.
Zumo de tomate, zumo de melocotón, cremas de verduras comerciales, gazpacho, yogures líquidos para beber
Miel
Textura similar a la miel.
No se puede beber con cañita, pero sí con un vaso.
Cuando se decanta, forma gotas grandes sin forma.
Yogur batido, natillas
Puding
Textura de flan o pudín.
Se come únicamente con cuchara.
Cuando se decanta, se cae como una masa con forma.
Flan, cuajada, requesón

Hay que seguir siempre las instrucciones del espesante y en todos los líquidos que se vayan a ingerir, ya que existen diferentes tipos de espesantes comerciales:

Aspectos a tener en cuenta para espesar bebidas con espesantes comerciales
  • La dosificación indicada en el envase corresponde a la cantidad necesaria para conseguir la viscosidad requerida en agua. Si espesamos otra bebida, la dosificación para la misma viscosidad puede variar.
  • Es importante respetar el tiempo que el espesante necesita para ejercer su función. Este tiempo puede variar también en función del líquido y de la temperatura de este, por lo que se recomienda espesar la bebida a la temperatura de consumo, respetando el tiempo de acción, pero siempre consumirlo en el periodo indicado. Así, evitaremos modificaciones de la viscosidad debido a un cambio de temperatura.
  • Siempre que se quiera añadir algún ingrediente a la bebida para su disolución o bien mezclar diferentes bebidas, será necesario hacerlo antes de añadir el espesante. Nunca se debe espesar una bebida y añadir posteriormente otro ingrediente.
Zumos
  • La viscosidad original de un zumo no siempre es líquida totalmente, por lo que podemos necesitar menos dosificación que la que indica el envase para conseguir la viscosidad necesaria.
  • En función de la fruta o frutas con las que hacemos el zumo, puede ser necesario colarlo antes de espesarlo.
Leche y bebidas lácteas
  • Conseguir que el espesante quede totalmente disuelto puede ser difícil. Por norma general, la leche y bebidas lácteas que contengan leche necesitarán un tiempo de acción más largo.
  • El espesante suele disolverse mejor si la bebida es caliente.
Bebidas vegetales
  • La disolución del espesante en las bebidas vegetales suele ser más fácil que en las bebidas lácteas, aunque también puede ser necesario un tiempo más largo de acción.
Bebidas con gas
  • Eliminar el gas de cualquier bebida que contenga ayudará a incorporar mejor el espesador.
Otras bebidas
  • En el caso de bebidas como el té, el café solo u otras infusiones, puede que se requiera mayor cantidad de espesante de lo que se indica para conseguir la viscosidad requerida.
  • En caso de tener un suplemento nutricional prescrito desde el centro de referencia, será necesario adaptar su viscosidad considerando estas recomendaciones.

Tomar la medicación con alimentos, bebidas o aguas gelificadas que también tengan la viscosidad indicada.

Sentado o cuanto más incorporado mejor, siempre evitando la hiperextensión de la cabeza

Comer lentamente y con suficiente tiempo entre cada cucharada.

Son aquellas compuestas por parte líquida y sólida: sopa con pasta, arroz con leche, yogur con muesli, leche con magdalenas, y alimentos como la mandarina, la naranja o las frutas muy jugosas. Ambas texturas en la boca impiden controlar la deglución de los líquidos.

Como la piña, las alcachofas, los espárragos y las carnes fibrosas, o aquellos que se desmenucen fácilmente al masticar, como galletas, chips, palitos de pan tostado o frutos secos. Evitar también las legumbres en las que la piel se desprende fácilmente.

Al entrar en contacto con el calor de la boca y la saliva se vuelven líquidos. Para este tipo de preparaciones se puede utilizar agar-agar o aguas gelificadas especiales, de venta en farmacias.

Se puede optar por espesar bebidas comunes siguiendo las pautas anteriores o bien, en alguna ocasión, preparar bebidas con sabores diferentes o no tan típicas. Para ello se elaboran de la manera estándar, se cuelan para evitar fibras o semillas y se espesan hasta conseguir la viscosidad requerida.

Limonada rosa casera

Ingredientes (para dos raciones)

  • 100 g de fresas
  • 50 g de arándanos
  • 70 g de zumo de limón refrigerado (aproximadamente dos limones)
  • Unas hojas de menta fresca
  • 200 ml de agua muy fría
  • 1 c/p de edulcorante (azúcar, miel, jarabe…), opcional y según la preferencia

Elaboración

  • Añada en un vaso triturador o en el recipiente de la batidora de mano eléctrica las fresas y arándanos (deben estar bien fríos y, por tanto, deben haber estado un par de horas en la nevera), limpios y sin hojas ; el zumo de limón; las hojas de menta; el agua, y el azúcar o edulcorante.
  • Triture el conjunto.
  • Pase la elaboración por un colador fino para eliminar cualquier partícula.
  • Separe la bebida en dos vasos.
  • Añada el espesador comercial para cada ración (de 200 ml y por separado, si desea espesar ambas raciones), siguiendo las indicaciones del producto y la dosificación para conseguir la viscosidad necesaria.*
  • Valide la viscosidad antes de consumirla. Servir fría.

* Hay que tener en cuenta que cuando elabore bebidas que incluyen ingredientes no líquidos, la viscosidad resultante puede corresponder a una viscosidad néctar o miel, así que deberá adaptar la dosificación indicada en el producto.

Procurar no comer solo.