Una alimentación suficiente y equilibrada, basada en alimentos frescos tal y como se explica en el apartado
recomendaciones generales, es imprescindible para hacer frente al tratamiento y la evolución del tumor. Durante los periodos de menor cansancio es importante aprovechar para asegurar esta alimentación equilibrada, variada y con todos los grupos de alimentos, y aprovechar para preparar una buena despensa y elaboraciones que pueden congelarse y estar listas para consumir.